Fue preciso preparar ese camino,
que discurría entre cerezos
y luego mirar al sur
y más tarde contemplar el norte
Fue necesario que soplara el viento
y se llevara el dolor de esta herida,
que lo aventara lejos
y como un ladrón, le robara la vida
a la fría muerte
****
Colores, blancos, lilas y rojos
como pétalos de rosas volando
entremezclados y vivos
con el último suspiro
de mi corazón enamorado
****
El sol ya no calienta el aire
penetra ahora húmedo y frío
en medio del desorden del día.
El otoño ha comenzado ayer
y no sé cuando termina.
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